1. Aumenta la satisfacción de los huéspedes
Un hotel ha de ser la extensión de los hogares de los huéspedes que se alojan en él. Por esta razón, brindar servicios personalizados que les hagan sentirse como en casa ayudará a su satisfacción.
2. Fideliza a los clientes
Captar clientes fieles y recurrentes es cada vez más complicado, sobre todo en un sector con un nivel de competencia tan alto como el hotelero. Contar con un gimnasio en un hotel, posiciona a estos establecimientos por delante de otros
3. Rentabiliza los espacios del establecimiento
Si existe un espacio en un hotel que está desaprovechado o que todavía no cuenta con una función, diseñar y equipar esta sala con las máquinas de gimnasio apropiadas hará que aumente su valor. Disponer de un gimnasio ayuda a conseguir la atención de más público y a incrementar los beneficios.
4. Ayuda a marcar la diferencia en el posicionamiento de un hotel
Contar con un gimnasio en un hotel sirve para ser único y diferente en una ubicación determinada, algo que puede que los competidores directos todavía no hayan desarrollado
